Las empresas sujetas al Impuesto sobre Sociedades deberán adaptar su sistema de facturación para emitir facturas electrónicas antes del 1 de enero de 2026. Para los autónomos y microempresarios, la fecha límite es el 1 de julio. Verifactu, por su parte, es un sistema desarrollado por Hacienda para garantizar la trazabilidad y el control fiscal de las facturas que se emiten.
Mientras la factura electrónica tiene como objetivo principal la digitalización y lucha contra la morosidad entre empresas, el sistema Verifactu se enfoca en la prevención del fraude fiscal y en evitar el “software de doble uso”.